jueves, 8 de septiembre de 2011

NACE UN MESIAS


“y dio a luz a su hijo primogénito,
le envolvió en pañales y le acostó en un pesebre,
 porque no tenían sitio en el alojamiento.”
 Lc 2, 7

Desde los fondos del tiempo, viene marchando
Solitario
Dios.

En comunión consigo, en múltiple y diversa comunidad.
Enamorado del hombre.
Abandonado por el hombre.
Caminando por el hombre,
Comparte su sed
Su misma su suerte
Para poder amarlo.
Para que los hijos, liberen al Padre
Y rompan sus propias cadenas.

Desde el fondo de los tiempos, viene marchando.
En su éxodo con los bastardos del faraón.
A recuperar la Tierra Prometida.
A reconstruir con el compañero Adán, hijo y profeta perdido,
El Reino bienaventurado del galileo.

Hoy ha decidido nacer,
Hermanado con el barro y con la mierda,
Harto de mártires -deseoso de ser el último-,
Animándonos a la lucha.

Elegiste el lugar: la casilla,
El rancho, la tierra.
Pediste permiso en las camas,
Y no te lo dieron. Naciste como el último,
Siendo el primero.
Con sangre de campesino, de obrero, de oprimido
Naciste profeta y dios.
Naciste como el esclavo
Para levantarte contra el amo por amor.
Moriste como ladrón, por el ladrón
como barrabás, por Barrabás.
Como romero, por Romero.
Viviste como un campesino,
Maestro de la verdad, y te
Hicimos rey, por defender la causa de Dios.
Ahora te han hecho César, a
Su imagen y semejanza.

Naciste niño frágil y embarrado
Moriste lumpen y rebelde de un sistema que te niega.
Así es mi Mesías, que Resucita y vive por siempre.
Ahora estás naciendo seguramente en la calle.

Dios, cuando sea la hora de la Cruz, dame la fuerza
Para estar de tu lado, ser el buen bandido.

Niño frágil,
popular,
proletario,
compañero,
que nace como un animal
que entendió la dignidad del hombre.
Lo que si permanece.